EL RÍO
En los
costados del serpenteante río,
Entre fatiga y sudor que
simula rocío,
El hombre trabaja el
campo y desgrana el trigo,
Como Incansable
espartano que derrocha brío.
Mientras, silencioso
sigue el río su camino,
Y al pasar por el recodo
y su arboleda,
Gira incesante la
incansable rueda,
Haciendo vibrar al
solitario y vetusto molino.
Trépida el agua lenta
camina,
Mueve la rueda y surge
la harina,
Como laboriosas hormigas
los molenderos,
Llevan el preciado polvo
a los graneros.
La ardua y noble tarea,
Termina al ocaso del sol
poniente,
Y la luna sutil se hace
presente,
Cobijando con su
radiante manto a la cansada aldea.
Pintado así,entre versos,parece algo bucólico y hermosísimo el hecho de laborar el campo.
ResponderEliminarPara muchos,su sustento.
Bonito poema.
Besos.
Gracias estimada Marinel por tu apreciable comentario y tu gentil presencia.
ResponderEliminarAbrazos.
Tengo que darte las gracias por que este escrito, me ha recordado a los veranos de mi infancia, cuando cambiaba la ciudad por un lugar así.
ResponderEliminarBesos
Así es Inma Luna, eran los tiempos cuando en la infancia podíamos disfrutar sanamente de las bellezas de la naturaleza.
EliminarGracias por tu gentil comentario y tu amable presencia.
Abrazos.
Precioso poema, me encantan las poesias sobre la naturaleza. Te felicito!!
ResponderEliminarun abraxo!
EliminarGracias por tu amable visita y tu gentil comentario estimada Marilyn.
Abrazos.
Infinitas gracias por concedernos el privilegio de sumergir nuestra alma en el bello manantial de tus versos. Muchos besinos de esta amiga con inmenso cariño.
ResponderEliminarEstimada Ozna-Ozna, un privilegio contar con tu amable visita y tu gentil comentario.
EliminarAbrazos.
ResponderEliminar¡Feliz fin de semana!
bajo la incipiente mirada
de la luna enamorada
de los riscos tornasolados de la alborada...
Atte.
María Del Carmen
Gatita, tu presencia engalana con sus versos el portal bohemio de mis sentimientos. Gracias por tu gentil visita y tu amable comentario.
EliminarAbrazos.
Un poema precioso.
ResponderEliminarHe vuelto espero tener tiempo suficiente para dedicarte por si acaso te dejo unos pocos de besos en conserva
EliminarMuy gentil de tu parte por tu apreciable visita y comentario.
Un placer contar con tu presencia.
Abrazos.
¡¡Cuántas cosas nos ofrece el río no es verdad!!
ResponderEliminarArmonía, paz y esa riqueza de riego para los campos que luego nos dan los frutos. También era la fuerza motriz para los molinos en nuestro pan diario.
Recuerdo de niño lo que se le apreciaba, su frescor en verano, su aroma a juncos, con alguna que otra rana saltando en las orillas.
Un bello poema a la naturaleza es esta serpentina de versos de plata como escogidos del mismo manantial.
Te envío mis saludos y un abrazo Chogüi.
Gracias también por tu visita. Juan.
Estimado Galeote: Un placer contar con tu gentil visita y tu amable comentario.
EliminarAbrazos.
Maravilloso poema Chogüi, me has recordado el trabajo de mi padre y de tantos campesinos, que vivían en armonía con el trabajo que realizaban, y la integridad de sus vidas... Tu poema para mí, está lleno del aroma del río, del trigo granado, del sonido del molino, y el agua cantarina recorriendo como manantial de vida.
ResponderEliminarUn abrazo, y mucha felicidad para el año que acaba de comenzar.
Querida Angeles, agradezco tu gentil visita y tu amable comentario.
EliminarAbrazos.
Gracias gatita por adornar con tus lindos versos mi humilde blog. Hasta pronto.
ResponderEliminarAbrazos.